¿Qué te apuestas a que lo consigo? - Pilar Murillo


                                               


El afamado, Paco Soler lleva presentando veinte años el concurso “¿qué te apuestas a que lo consigo?” que se emite todas las noches del sábado a las diez.
El conductor del programa sale vestido con ropa muy extravagante, cosa permitida en este tipo de espectáculos. Luego él es un atractivo hombre que representa tener quince años menos de los sesenta que realmente tiene.
Todo está preparado para una emisión más. El plató con quinientas personas de público incluidos una representación política. Paco presenta el programa, televisado en directo para todo el país. Es un show muy popular y con un nivel de audiencia muy alto. A la gente les gusta ver las disparatadas hazañas de los concursantes.
Se ha visto de todo, desde el que rompe determinado numero de nueces en pocos segundos de una manera muy peculiar; con el trasero, hasta el que arrastra una tonelada de peso con sus dientes. Hoy el número estelar lo va a llevar a cabo Lorenzo. Un chaval de veintidós años que apuesta que puede dar doble salto mortal por encima de un coche en marcha, ayudado de unos resortes colocados en las piernas. El chaval está calentando mientras es ovacionado por el público que está expectante ante lo que están a punto de ver en plató y en sus casas.
Lorenzo está decidido, la adrenalina recorre todo su cuerpo. Ya lo ha practicado en dos ocasiones más pero sin mucho éxito. Su tenacidad lo empuja a volverlo a repetir y cree que ésta vez lo va a conseguir. La verdad es que con tal finalidad es fundamental tener fe en uno mismo a parte de ser temerario.
A Lorenzo le sobra el miedo ante el riesgo o quizás ni se ha parado a pensar en el peligro que conlleva. Para llegar a buen puerto debe tener fe en sí mismo y ahí entra en una contradicción; al arriesgar su vida no muestra tener mucho apego por ella.
El muchacho ya está preparado. Un amigo es el encargado de conducir el coche que a una velocidad moderada va frente a él. Lorenzo da el doble salto mortal sin ser atropellado pero cayendo de bruces contra el suelo. El publico del plató deja escapar una exclamación de susto y sorpresa, mientras la cámara no deja de enfocarlo. Paco Soler se acerca al chico, que sigue inerte.
--¿Te encuentras bien Lorenzo? (Una pregunta un tanto estúpida ante la magnitud de la torta.)
Evidentemente, el chaval no le responde, ni se mueve.
La cámara deja de enfocarlo y pasa a otro plano, el presentador dice la típica frase “son las cosas del directo. Lo había hecho anteriormente y le había salido bien” Eso dice para calmar al público presente y a los tele-espectadores, aunque, sólo era eso, intentar tranquilizar. Lo cierto es que no había salido bien nunca, pero tampoco se había herido gravemente en esas ocasiones.
Una azafata grita “un médico, por favor”. Los sanitarios entran enseguida y lo sacan en camilla.
Pasadas unas horas es operado de la columna vertebral, y está en coma inducido. Su vida no corre peligro, pero es probable que se quede en silla de ruedas.
El concurso más famoso de tv, se despidió de forma trágica. Ha sido retirado de antena después de veinte años ininterrumpidos. Ahora Paco Soler que por cada emisión semanal cobraba doce mil euros se queda en paro. Le deseamos que haya ahorrado lo suficiente para sobrevivir ante su incipiente crisis laboral.
Desde aquí también manifestamos nuestro deseo de una pronta recuperación al osado joven Lorenzo, concursante de la última emisión de “¿Qué apuestas a que lo consigo”.
Se comenta que la productora del concurso más veterano de TV y de final lamentable, está en preparativos de un nuevo programa de formato similar y se baraja éste nombre: “¿Qué estas dispuesto a hacer por 10.000 €?” En cuanto salga a la luz la noticia, miles de suicidas se apuntaran, lo tengo muy claro.



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