La maldad tiene tantas caras como la luna. Hala, que bonita me ha quedado esta frase. Pero ¿cuántas caras tiene la luna? No sé, voy a mirar, esperad un momento. Pues nada, que solo tiene dos. Qué desilusión. Claro, ahora que recuerdo, lo que tiene son varias fases. ¿Y cuántas serán? Uy, voy a mirar a San google de nuevo. Buffff... era muy largo de leer, no sé por qué la gente se enrolla tanto para explicar algo tan sencillo. No obstante, también me vale. La maldad tiene tantas caras como las fases de la luna. ¿O no? Igual son demasiadas. No sé, casi que lo dejo como al principio. La maldad tiene tantas caras como la luna, es decir, la cara visible y la cara oculta. Sí, eso es más preciso. Bueno, ahora voy a ver que hago con esa frase, si una poesía, un relato o igual hasta me sale una novela. Sí, sería un buen título. Bueno, voy a pensarlo, os dejo, que se me queman las lentejas. Es lo que tiene ser escritora y ama de casa a un tiempo. Y no me quejo, que por lo menos tengo una habitación propia. Ya os contaré. Chao.
Este obra está bajo una licencia de Creative Commons Reconocimiento-NoComercial-SinObraDerivada 4.0 Internacional.