Marian
es una estudiante de periodismo, aplicada en sus estudios pues
siempre saca buenas calificaciones, la mejor de su clase, tiene
espíritu aventurero y cuando lee una noticia o le mandan un trabajo
siempre va más allá de la simple noticia indaga hasta encontrar el
fondo del asunto. Vive con su madre impedida, por culpa de una
enfermedad quedo en silla de ruedas, por lo que su hija tiene que
atender todos los asuntos del hogar y cuidar de su madre además de
estudiar la carrera. Pero Marian piensa que su vida es muy aburrida y
le gustaría vivir otra vida diferente, quiere romper con su monótona
vida y un día su sueño se cumplió.
Era
un Martes del mes de Noviembre y los estudiantes habían salido de un
examen de la facultad un poco inquietos pues no estaban muy contentos
de cómo les había salido, todos menos Marian ella si estaba segura
de aprobar, pues había estudiado todo el fin de semana sin
descansar mientras los demás seguramente habían salido de fiesta
.Como era habitual en ella le empezaron a sonar las tripas y empezó
a tener haber pues ya eran las doce del mediodía y había desayunado
tan temprano que se antojó ir a la cafetería que esta al lado de la
facultad. Se sentó en una mesas que estaba situada en la esquina y
pidió un croissant a la plancha y un tazón de café con leche,
saco el móvil conecto los cascos para escuchar su música favorita y
relajarse leyendo el periódico mientras se toma tranquilamente el
almuerzo. Todo parece tranquilo y normal en la vida de la estudiante.
Cuando alza la vista por encima de la hoja de la sección de noticias
y ve que entran unos hombre con gabardina gris y unos sombreros que
les tapa casi toda la cara. En ella se despierta la intriga y
disimulando con el periódico les empieza a observar.
Los
hombres de gabardina gris solo hablan con la dependienta sin pedir
nada para tomar pero hay algo en ellos que no es habitual. Por lo
menos a ojos de Marian que es la que está pendiente esos extraños
personajes. Cuando acaban de hablar salen de la puerta y la
estudiante observa a través de la ventana de la cafetería , que se
montan en unos coches grandes también del mismo color y desaparecen.
Llega la hora de ir casa y hacer la comida para ella y su madre,
toma de un trago lo que queda de café, deja la prensa y con el
dinero para pagar la consumición. Mientras va caminando escuchando
música en su cabeza revolotea la intriga de esos extraños hombres.
¿Quién son? ¿Qué les habrá preguntado a la camera? ¿Qué
hacían por allí? Si nunca les había visto.
Cuando
acabo de comer se hecho un rato en la cama para descansar diciéndose
a sí misma que seguramente eso que había visto era causado por su
imaginación o por el estrés ocasionado por el examen e intento
cerrar los ojos. Pero en su interior sabía que no era cierto, su
imaginación no le había causado esa mala pasada ni tampoco el
estrés, ella les había visto y tenía que llegar hasta el final
para quedar tranquila. Pegando un salto de la cama, se lavó la cara,
se arregló el pelo y cogió su abrigo para salir a la calle a
investigar. Empezó a preguntar a la gente la ciudad describiéndolos
pero nadie vio nunca nada. Cada vez que no encontraba respuesta su
intriga aumentaba . Entro en todas las cafeterías y ocurría lo
mismo , los camareros les respondían extrañados o pensando que
estaba loca, nunca habían entrado persona alguna con esos rasgos.
Hasta que se dio cuenta que había entrado en todas menos en la que
ella los había visto, apresurándose con la emoción de que allí
encontraría alguna respuesta llego hasta el establecimiento, se
acercó al mostrado y formulo la pregunta, Los camareros le dijeron
que era la primera vez que se los habían visto, tenían un acento
raro y le hicieron preguntas un tanto peculiares, y sin pronunciar
más palabra se marcharon.
Marian
regreso a su casa un poco decepcionada quiso desistir ya cansada de
no encontrar respuesta al enigmático asunto de las extraños hombres
vestidos de gris y sombrero. Ya era de noche y mañana tenia clase de
nuevo. Se metió en su cama después de darle las buenas noches a su
madre y de preparar los libros de las asignaturas del día siguiente,
se tapó con su edredón nórdico y cerró los ojos.
Cuando
sonó el despertador se metió en la ducha para despejar, era
temprano y tenía que preparar el desayuno de su madre y de ella. Tan
pronto como acabo le dio un beso a su madre cogió la mochila y se
dispuso a ir caminando escuchando música hacia la facultad. Había
soñando toda la noche con esos extraños y todavía revoloteaba en
su cabeza la intriga y la idea de llegar al fondo del asunto. En la
facultad consiguió olvidar a los hombres de gris y centrarse en lo
que el catedrático de la asignatura estaba explicando, pero cuando
acabo las clases volvió la idea, no podía dejar pasar esa
oportunidad, ella era así de tenaz con las cosas si empezaba algo
hasta que no la acabara no quedaría tranquila.
Cuando
acabo de comer con su madre le dijo que iba a su habitación a
estudiar, le dio un fuerte abrazo y se encerró en ella. En realidad
no tenía nada que estudiar pues habían pasado los exámenes, al
coger su agenda vio que en una asignatura les habían mandado
escribir un artículo sobre un tema que ellos quisieran. Era la
excusa perfecta para seguir con su investigación escribiría sobre
los hombres de gris. Encendió su portátil y cogió unos cuantos
folios para hacer anotaciones en sucio. Entro en google y escribió
“Hombres grises” cuál fue su sorpresa que había encontrado
desde artículos hasta video en YouTube.
En
unos de los artículos encontró uno que le llamo poderosamente la
atención estaba escrito por un astrologo americano y decía que
desde hace millones de años antes que los humanos existiéramos
habían estado unos seres planetoides y habían puesto unos huevos en
distintos lugares del planeta para que cuando llegáramos los
humanos, esos huevos eclosionaran, esos seres nos pudieran gobernar.
Para Marian era algo asombroso, no podía dejar de investigar sobre
el asunto, comenzó a buscar más información sobre el astrologo a
ver videos hasta que encontró en YouTube uno que explicaba lo
siguiente:
Decía
que esos huevos habían eclosionado y se habían juntado con otros de
otra raza llamados los reptirianos, Los resptirianos son seres
humanoides con piel de réptil y grandes dimensiones, guerreros y
malvados que quieren gobernar la tierra, los hombres grises son más
inteligentes y se pueden camuflar más fácilmente, pero con el paso
del tiempo tanto los hombres grises como los reptirianos habían
mutado a la forma humana colocando sus huevos en familias famosas e
importantes del mundo y asi pudieran gobernar juntos nuestro
planeta.
Era
el trabajo perfecto y así ella había conseguido llegar al fondo del
asunto, esos extraños seres que había visto el Martes y que nadie
más los habían podido ver ni conocían de su paradero eran los
Respitirianos y los grises, había pruebas documentos y artículos no
era una cosa inventada cosecha de su imaginación. Ilusionada abrió
el Word y empezó a escribir sus manos parecían tener vida propia,
se pasó horas escribiendo y escribiendo. Cuando por fin acabo solo
le faltaba el titulo artículo y entonces surgió como de la nada.
“MUJER, BUSCA HOMBRE GRIS”
Ahora
Marian es una afamada periodista de investigación que ha escrito
libros siendo muchas veces top ventas en todas las librerías. Le
han hecho entrevistas en muchas cadenas de televisión sobre sus
investigaciones y es una gran aficionada a la ciencia esotérica.
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