Ya sé que es una
estupidez enfadarse por cosas que no tienen solución, sobre todo por
el tiempo, es una sinrazón
total y absoluta, pero yo soy
así, qué le voy a hacer. Creo que mi cerebro es demasiado proclive
al optimismo y claro,
después pasa lo que pasa, que las cosas nunca salen como una cree
que van a salir. Me gusta el sol y el calorcito, la playa, la caña
en el chiringuito al atardecer, un paseito a la orilla del mar por la
mañana temprano... vaya, las cosas normales para hacer en el verano,
no tengo gustos refinados. No busco irme de vacaciones a Honolulú ni
a Sri Lanka, me vale pasar una semanita en mi casa de Galicia... A lo
mejor ahí está el problema... Galicia. Claro que... bien pensado...
paisajes incomparables, buen comer, gente amable, nada de calores
agobiantes.... a lo mejor el precio que hay que pagar por tanto lujo
es una semana de lluvia en el verano. También es mala suerte que me
haya tocado a mi.... Resignación.
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